La obra, realizada por José Terencio Farré, se compone de dos imágenes religiosas que corresponden con la escena de la aparición del Arcángel San Miguel a Jesús durante la oración en el huerto de los olivos anunciándole su pasión y muerte.

Dicha escultura es un fiel reflejo de la imagen barroca de Francisco Salzillo que recorre las calles de Murcia durante la Semana Santa.

El proceso de ejecución de la obra llevado a cabo por el artista se corresponde con “la forma de obrar de los escultores académicos” donde se podrían distinguir los siguientes pasos:

• Dibujos de abocetado o apuntes tomados del natural (escultura de Salzillo)
• Moldeado en barro de las caras, manos, etc.
• Extracción de un molde recubriendo los bocetos de barro con escayola, gasas y esparto donde al sellarlo se obtienen unos nuevos bocetos que luego servirán de base para realizar la talla por el sistema de puntos.
• La talla es de madera de bulto redondo recubierta por un bol de yeso y policromada.

Debido al avanzado estado de deterioro y descomposición que presentaba, el cual impedía incluso que se pudiera mover del lugar con gran posibilidad de romperse, en el año 2006 se procedió a la restauración de las imágenes desinfectando, consolidando, fijando y limpiando la película pictórica.

Ante la imposibilidad de realizar una restauración solida que pudiese resultar satisfactoria en el anda, se optó por realizar una completamente nueva cambiando su aspecto estético original. Esta trasformación se ejecutó siguiendo los gustos del estilo barroco (obra inspirada en bocetos de D. Vicente Ibáñez) a los que también corresponde las imágenes. El anda fue tallada en madera de pino lacada y dorada con pan de oro y se sustituyó la instalación eléctrica de los faroles del anda procesional.